domingo, 2 de marzo de 2014

8 de marzo. Día internacional de la mujer

La mujer tuvo un papel protagonista durante el periodo morisco, fueron las conservadoras de la tradición, y las transmisoras de la fe ante la ausencia de los alfaquíes, o líderes espirituales, y qué mejor que realizar un acto en la fecha que se celebra el día internacional de la mujer, que recuerde a aquellas mujeres y sirva de reconocimiento de la importancia que en nuestra sociedad tienen las actuales.
Con la belleza que existe en esta época previa a la llegada de la primavera, sería un delito encerrarnos, por los que hemos decidido proponeos un plan para disfrutar de la historia y de la naturaleza, todo en el mismo lote y con el apoyo logístico de nuestros amigos del proyecto asociativo Caramucel.
Os proponemos sorprender a vuestra pareja, a esa maravillosa mujer a cuyo lado siempre estáis:
- En primer lugar mantened esta información en secreto. Cargad en el coche calzado y ropa cómoda, y dadle cualquier pretexto para pasar el día fuera. Se enfadará por vuestro silencio, pero lo que viene después compensará.
- Dirigios al valle de Ricote, visitad  por la mañana las norias de Abarán, el callejero antiguo de Blanca y Ojós, el Gurugú en Ulea y desde allí deteneos a ver la excelente vista del Villanueva que se aprecia desde ese lugar.
- Ya será cerca de medio día, buen momento para un aperitivo, pero rápido, que el tiempo se echa encima.
- Comed en Ojós o en Ricote, tenemos muchos y variados sitios: bares típicos, restaurantes, lugares de tapas, de todo con una calidad garantizada y precios para todos los bolsillos. Tampoco hay que llenar mucho la tripa, que nos queda la sesión de tarde, y esta va a ser un poco exigente.
- Os esperamos a las cuatro de la tarde en la plaza de Santiago de Ricote, no tiene pérdida, está a la entrada del pueblo. Si alguien se pierde, sólo tiene que preguntar por esa plaza, o como más popularmente es conocida, la placeta de Manducho, hasta os acompañarán.
- Desde allí vamos a iniciar una excursión que recordaréis toda vuestra vida: subiremos a la fortaleza de Ricote. Un ascenso por senda forestal, sencillo, pero que hay que hacerlo con la tripa no muy llena y no se nos debe olvidar el agua.
- Una vez en la fortaleza podréis disfrutar de la magia de ver cómo sus muros vuelven a reconstruirse, veréis deambular a la guardia musulmana que la defendía, como si fueseis asaltantes identificaréis sus puntos débiles, y percibiréis muy próximos los espíritus de los antiguos habitantes de Ricote refugiados en su castillo en momentos de crisis, y todo ello gracias a vuestra imaginación y las explicaciones de Jesús Joaquín López Moreno, uno de los grandes conocedores de este castillo y de las fortalezas cercanas que blindaban este valle frente a ataques externos.
- La vista es para no olvidarla. Desde el castillo se ven perfectamente las primitivas huertas del valle de Ricote, esos oasis creados a partir del siglo VIII y que fueron la principal fuente de riqueza de aquella tierra, y que en parte siguen siéndolo hoy gracias a sus agricultores, herederos de aquellos míticos labradores musulmanes que las crearon. Veréis a su primitivos labradores trabajar la tierra, construir y utilizar sus sistemas de riego, reconstruiréis las primitivas poblaciones, en definitiva realizaréis un viaje de más de mil años.
- A partir de las siete de la tarde todo habrá terminado, y será vuestra imaginación la que haga soñar a vuestra pareja, y eso ya no corresponde a la organización.
Os esperamos en el valle de Ricote el próximo día 8, a las cuatro de la tarde en la plaza de Santiago de Ricote. Alarbona, la fortaleza de Ricote, está esperándoos desde el siglo IX, no os retraséis más.

Fotografias: Alarbona, el castillo de Ricote, construido en el siglo IX.