El decreto de expulsión afectó a todo el valle de Ricote, y el pueblo de Ojós no fue la excepción.Para quien todavía no conozca este pequeño pueblo decirles que fue donde los moriscos desarrollaron sus mejores artes hortícolas, donde rodearon todas sus parcelas de tapias de piedra y convirtieron esos huertos en los primeros invernaderos de la historia, donde se ha conservado mejor el trazado urbano primitivo, donde el verde es más intenso en el valle de Ricote.
Su Ayuntamiento ha preparado una serie de actos para conmemorar el próximo 27 de octubre el IV centenario de la expulsión de sus vecinos moriscos. Si todavía no conoces Ojós, este es un buen momento para hacerlo.
Programa de actividades a desarrollar en Ojós el próximo domingo 27
de octubre conmemorando el “Día de los expulsos”.
9:50 horas
1º. Toque de arrebato y llamada para que los vecinos y visitantes
acudan a la puerta del Ayuntamiento.
2º. Entrega de ramos de laurel.
3º. Salida en procesión hasta el “Jardín de los
expulsos” del Peñón, donde se leerá el Real Bando
que acordaba la expulsión de los denominados moriscos del Valle de
Ricote.
10.15 horas
Inauguración, por D. Pablo Melgarejo Moreno, Alcalde-Presidente de
Ojós, del “Jardín de los Expulsos” y del monolito
homenaje a todos los expulsados de esta Villa.
10.30 horas
Lectura del Bando de expulsión de los moriscos de la Villa de Ojós,
por D. Buenaventura Buendía Banegas.
10.35 horas
Lectura pública nominal, por un grupo de 40 personas, de los
expulsados en la villa de Ojós.
10.50 horas
Intervención de D. Antonio Guillén Campillo, cura párroco de Ojós,
sobre la expulsión de los moriscos.
11 horas.
Celebración de una solemne misa en la Iglesia parroquial de San
Agustín, en memoria de los moriscos expulsados de Ojós.
17 horas.
1º. Acto en el jardín de la antigua depuradora, en el que se
realizará la plantación de cuatro cipreses, uno por cada siglo
desde la expulsión de los moriscos, además, de un olivo, una
palmera y un cedro, como árboles más representativos de las tres
culturas. Estos árboles serán, simbólicamente, plantados por
personas de todas las edades como representantes de las familias
descendientes de los expulsados.
2º. Inauguración, por el Alcalde de Ojós, del Jardín que pasará
a denominarse “Jardín de las tres culturas”, que simbolizará la
convivencia, que durante varios siglos tuvieron judíos, cristianos y
árabes, en Ojós, en el valle de Ricote y en España.
